Ángela es un ejemplo inspirador de resiliencia y dedicación. No solo trajo su pasión por la danza a AIRE a través del Proyecto «Alegría en Movimiento», sino que también se convirtió en un referente de cuidado y apoyo para las niñas de la comunidad. Al ofrecer clases de ballet, está proporcionando a estas jóvenes no solo una oportunidad para el desarrollo artístico, sino también una válvula de escape y un espacio para fortalecer su autoestima.
El hecho de que ella esté ayudando a niñas en situaciones vulnerables refleja su deseo de contribuir a un futuro mejor, tanto para sus hijas como para otras niñas que, al igual que ella, buscan un camino de crecimiento y transformación. En este contexto, la danza va más allá de un simple aprendizaje técnico; es una herramienta de empoderamiento e inclusión.
El Proyecto Alegría en Movimiento es un ejemplo de cómo la pasión y el trabajo colectivo pueden transformar vidas, ofreciendo no solo una actividad enriquecedora, sino también creando una red de apoyo que fortalece la comunidad. La presencia de voluntarios, como Frances Fukuda, que ayudó con las donaciones, demuestra cómo el involucramiento de las personas puede marcar la diferencia en la realización de sueños y en la mejora de vidas.
Hoy, la familia de Ángela ya no vive en AIRE. Alquilaron una casa en la región, y una de las principales fuentes de ingresos de la familia es el negocio de accesorios de cuero (@adaia_acessórios) que han creado. ¡Asegúrate de echarle un vistazo y apoyar también este emprendimiento!
¡Gracias, Ángela, y te deseo mucho éxito!
